Wau! Si alguien me preguntase acerca de la segunda entrega de Batman esa sería la onomatopeya dominante.
13 de agosto de 2008. Mi novia y yo decidimos acudir al estreno de El caballero oscuro y elegimos la sesión de las 18:45 para hacerlo, una sesión un tanto extraña para mis gustos nocturnos, pero la adecuada para no quedarme dormido por culpa del trabajo diario (ja!). Hacemos cola en las taquillas, una no muy pronunciada pero lo suficiente para levantar espectación, y acto seguido nos hacemos con dos entradas que nos sitúan en una posición privilegiada de la sala: hacia arriba, como a mí me gusta.
Una vez en nuestras butacas, y como introducción a la película, intercambiamos opiniones acerca del actor ya consagrado, aunque póstumamente, Heath Ledger con su papel de Joker: El espacio se va llenando de espectadores y con él palabras como "papelazo", refiriéndose a Ledger; "peliculón", etc... No aparto la vista de dos personas cuando hacen su aparición en la sala vistiendo camisetas del Batman para cómic y se sientan a nuestro lado. Momentos previos a la proyección llegan los "tres personajes" que se sentarían a mi derecha y no pararían de comentar el uno con el otro y de reírse porque sí... en fin, los que te joden momentazos de película debido a la necedad que los mueve a comportarse así cuando pagan por ver algo (a mí, por lo menos, estas cosas me desconcentran).
Se puede mascar la tensión en el ambiente. Las luces se apagan y vemos trailers como el de Las Guerras Clon, la nueva serie animada de Star Wars (no me la perderé!). El momento ha llegado... BBBBOOOOOMMMMMM!!!! esto es dinamita! y nunca mejor dicho (ya sabréis por qué cuando la veáis). Voy desmenuzando cada escena lo más rápido que puedo, pues el ritmo varía a lo largo de la película: de transiciones vertiginosas pasamos a una pausada, propia de los momentos de diálogo y de la comprensión de la historia. La puesta en escena tampoco se queda corta, pirotecnia por un tubo diría yo! aunque bien mezclada con la acción del film, el cual se ve lleno de personajes carismáticos conocidos y nuevos. Aaron Eckhart, por ejemplo, cumple de sobra los requisitos de su interpretación de Harvey Dent, el nuevo fiscal del distrito; la nueva Rachel Dawes, anteriormente interpretada por Naomi Watts y ahora por Maggie Gyllenhaal, supera con creces el papel de sus predecesora, pudiendo ser por el cariz trágico que toma esta nueva entrega. Christian Bale, Michael Caine, Gary Oldman, Morgan Freeman... como siempre sublimes en su tarea de entretener al respetable. Bale nos complace con un Batman más maduro y más seguro de sí mismo mientras que su querido mayordomo Alfred (Michael Caine, actorazo donde los haya) pone la nota de humor y sentimentalismo entre héroe y socio. Gary Oldman, destilando fuerza y heroicidad "social", se convierte en el policía que todo justiciero incompetente quisiera ser. Freeman, a su vez, clava el papel de secundario, no por esto menos importante dentro de la trama. A mi gusto, un papel no hecho a su medida después de verlo en "Paseando a Miss Daisy" o "Seven"...
Por último, cabe mencionar... qué demonios??!! Sería imposible hablar de Batman: El caballero Oscuro sin mencionar al gran Heath Ledger en el papel de Joker! El fallecido actor desborda en cada escena llevando la imagen habitual del Jack Nicholson sonriente, en la versión de Tim Burton, a la de un psicópata delirante que intimida cuando cuenta la historia de sus cicatrices o formula la pregunta "¿Por qué tan serio?" En mi opinión, una ACTUACIÓN con mayúsculas que le valdrá una posible nominación al Oscar a título póstumo. ¿De sus apariciones? me quedo con la escena de su presentación a la Mafia, la del video casero,la del "¡¡¡Golpéame!!!", la del interrogatorio... es decir, casi todas!
La música de Hans Zimmer se queda grabada en el espectador y eleva aún más la cota de tensión en estas escenas. No recuerda, como es lógico, al leitmotiv tan logrado por Danny Elfman para las predecesoras, aún así es sobresaliente.
En principio, me quedo con el calificativo de "muy buena", aunque tendré que verla con detenimiento para sacarle más aciertos o fallos (a secas!). Esta película me ha hecho sentir de nuevo lo que es ver a Batman en la gran pantalla, me ha hecho recordar a sus antecesoras de los 90, cuando Michael Keaton saltaba a la fama con el rol del hombre murciélago y Nicholson nos dejaba otro broche de oro interpretativo como Joker. Ha adquirido un tono más oscuro, más trágico. Recordemos a El imperio contraataca, que superó con creces el espisodio anterior y que muchos califican como el mejor capítulo de la saga de Star Wars; El Padrino: parte segunda, otro ejemplo de que segundas partes puden incluso superar a la primera. Aquí se está dando ese mismo caso y, aunque he de decir que hoy en día la originalidad escasea, Batman: El caballero oscuro es digna sucesora del metraje rodado por Burton además de ofrecerme algo que otra película actual no ha logrado: disfrutar como un enano, en gran parte gracias a Heath Ledger, pues sin él la película perdería un 50 % de su calidad.
Las luces se encienden, el público se va...
sólo quedo yo en mi sitio
con cara de anormá'!
2 comentarios:
Qué ganas por el amor de Clifffffff!!!!
Yo me vi Wall-e, y la recomiendo encarecidamente....
La semana que viene iré...
Un Joker que no sonría permanentemente no es un Joker, y perdón por el frikismo. Un Joker manejando armas pesadas, en fin. Suficiente para no querer verla, y lo siento por el bueno de Christian.
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